¡Viva la Cultura nacional-socialista de este país...! (I)

Hoy, cuando me conecto a Facebook, leo una noticia: (nombre del autor, en adelante "autor") presentó su libro en institución (un lugar que no quiero darles publicidad y que en adelante la llamaré así, institución). De inmediato, me puse en contacto con él a través del chat de esta red social para indagar cómo presentar mi libro allá.

Al principio de la conversación me sorprendió la idea de que ese autor no pagara por usar esa sala sino que, al contrario, cobrara por presentarla. Mi sorpresa me llevó a preguntarle el porqué y entendí mucho después que se trataba de un libro patrocinado por esa institución; claro, he ahí el misterio resuelto.

Atrevido por mi interés en presentar en esa institución, me dijo que no era un salón abierto al público y que, en todo caso, preguntara en otra institución (en adelante, biblioteca). Mi interés por saber un poco más acerca de esa institución, fui a su página y...¡sorpresa!: es una institución pública. 

Volví a preguntarle que el porqué no era un salón abierto al público cuando se trataba de una institución pública a la cual me respondió que era una institución dependiente del ayuntamiento y que el presupuesto que ellos tenían era público. ¡Vamos, para tener dudas de su titularidad pública! Sigue el autor diciéndome que dicha institución solo está abierta al público para dar conferencias y demás actos de asistencia pública y gratuita.

Por otro lado, y como ya sugerí antes, me sugiere presentar en una biblioteca de esa misma ciudad pero me advierte que para presentar mi libro en ella una condición indispensable es que yo sea de esa ciudad. Extrañado por esa restricción, le pregunto cómo es posible que para presentar un libro en una biblioteca tenga que cumplir con el requisito de ser de esa ciudad no si antes comentar: "Después nos quejamos de los nacionalistas..."

Me sigue comentando que dicha biblioteca no está abierta al común de los escritores sino solo a los que son residentes allá. Tras esto, comento que no me gustan los nacional-socialismos encubiertos.

Le replico que si es así cómo debe existir la Cultura. El autor en cuestión, siempre muy amable en toda la conversación, defiende la idea de que debo presentar allá donde conozca a más personas y, termina, con un "Es el modo de vender más libros". Sigue defendiendo la idea nacionalista a más no poder con el comentario de "Pero es una pena que corras con un montón de gastos para nada, entiéndelo". ¿Para nada? ¿Cómo que "para nada"? ¿Una presentación de un libro es "para nada"? ¡Y que me lo diga un autor...!

Por otro lado, me intenta convencer de que "los sitios públicos no están abiertos al primero que lo solicita, tienen sus programaciones y sus fechas cogidas de antemano ...Y SUELEN DAR PRIORIDAD A LOS HABITANTES DEL LUGAR ANTES QUE A LOS FORÁNEOS".

En fin, tras esto no me extrañaría en absoluto que la "borreguez" más absoluta se instale en este país llamado, y no sin razón, EsRAÑA.

¡Qué pésimo el concepto de la Cultura en este país, pero qué pésimo...!

¿O sea que yo, como canario que soy, solo debería presentar mi libro en Canarias? Según este ESCRITOR, sí.

¡Viva la Cultura...nacional-socialista instalada en este país!